Igual me pierdo, pero si yo he invertido digamos 10.000 euros, y sólo he sacado 1000 euros a mi cuenta, entonces tengo invertidos 9000. Si vendo ahora lo que tengo por 5000, he perdido 5000 euros en total. En cambio, cuando hago el balance, incluido el 2021 hasta el dia actual, me sale que tengo unos beneficios de 2000. Qué es lo que pasa?
Lo que pasa es que piensas en fiat y aquí hay que pensar en permutas.
Compro 1 btc con 10.000€. Btc sube 20.000€ y vendo 1.000€ en btc y me paso esos euros al banco. Me quedan 0,95 btc en mi cuenta, con los que compro BNB en ese mismo momento también, cuando btc valía 20.000€. BNB estaba a 500€, por lo que compré 38 BNB. Pasa el tiempo y BNB baja a 131,57€, y decides vender tus 38 BNB por 5.000€.
El cálculo que tú haces en fiat sería: metí 10.000€, saqué 6.000€ en total, mis pérdidas serían de 4.000€. Ok, eso es así.
Pero a nivel fiscal no se hace por cambios a fiat, sino por permutas. En ese ejemplo, tendrías lo siguiente:
- Venta de 0,05 btc por 1.000€: beneficio=500€
- Venta de 0,95 btc por 38 bnb: beneficio=9.500€
- Venta de 38 bnb por 5.000€: pérdida=14.000€.
Si todo es lo materializas en el mismo año fiscal, te saldrían unas pérdidas de 4.000€, ya que podrías compensar las ganancias con las pérdidas y coincidiría con tu análisis en fiat. Ahora bien, si esto se realiza en distintos años fiscales y primero has materializado las ganancias (las dos primeras ventas), pagarías impuestos por 10.000€ de ganancias y si el año que viene haces la tercera venta, pues te habrás salido en pérdidas y encima pagando impuestos por unas ganancias ficticias. Eso sí, esas pérdidas tienes hasta 4 años para compensarlas en un futuro, pero de momento, ya has pagado ganancias por adelantado.
Esto es solo un ejemplo muy sencillo, pero es simplemente una muestra para entender cómo funciona esto y que el orden de materializar pérdidas y ganancias en distintos años, es fundamental.
Por eso siempre he dicho que más allá de pensar en nuestras compras y ventas, no está de más entender cómo va esto de Hacienda y analizar cada año si nos interesan materializar pérdidas o ganancias ese año y cómo gestionar eso. A veces será inevitable que paguemos por ganancias ficticias, pero otras veces se pueden ir evitando con una buena gestión del portafolio.